jueves, 28 de agosto de 2008

MISS "HAWAIIAN TROPIC"






¡Había que ver al Presidente en convincente gesto de contrición, orando por la paz a instancias del grupo de representantes de diversas confesiones religiosas reunidos en el palacio de gobierno!

¿Quién iba a decir que a sólo un par de horas de dicha escena, el inefable Evo Morales la volvería a emprender verbalmente contra algunos ciudadanos bolivianos –esta vez les volvió a tocar a los periodistas-?

A diferencia de otras veces, sin embargo, en las que las instituciones del periodismo solicitaban cordialmente que el Primer Mandatario respetase la profesión sin conseguir que éste moderara el tono de su resentido verbo, el martes 16 tuvo que ser él quien leyera cómo un periodista de renombre le dedicaba una zamba canuta de antología (“Nosotros, los sucios” Humberto Vacaflor, La Razón). Va en camino a convertirse en un clásico del género columna.

Probablemente, muchos de los cortesanos que hoy echan conjuros brujescos en contra del autor de dichas líneas estaban aplaudiendo rabiosamente –salvo el ministro San Miguel que se regodeaba entre las huestes berzainistas- cuando el mismo sopapeaba con su pluma al tristemente célebre Carlos Sánchez Berzaín. Ergo, libre de sospecha, el periodista, al sentirse aludido por las invectivas presidenciales puede permitirse unas “caricias” a Morales Ayma.

Bien, pero como el Presidente se ha montado en el resultado del referéndum que a él le conviene los más grave que la pluma del columnista le haya causado haya sido un cosquilleo en las fosas nasales y un estornudarse en la noticia. Él y su gobierno se han subido a un “Hummer” –estos espantosos vehículos que parecen haber sido diseñados por “Homer” (Simpson)- y están dispuestos a meterle hacia el abismo sin fijarse en los costados y cargándose a todo aquel que se les cruce en el camino.

Así pues, quiere forzar la realización de la consulta sobre el texto de su constitución sin considerar siquiera que previamente hay que devolverle al país un sistema electoral confiable. Esta tarea no se la hace en tres meses; un proyecto serio de intervención en esta materia podría, a ritmo frenético, ejecutarse a lo largo de 18 meses. Otra cosa es que al Gobierno –y a la propia Corte, sumisa- no le interese hacerlo. ¡Ni siquiera hay credibilidad interna en el Poder electoral y se quiere introducir de inmediato el voto en el exterior –un derecho, sí, pero un grosero despropósito en las precarias condiciones actuales-!

A estas alturas se preguntará usted qué tiene que ver todo esto con el título. Sucede que estuve meditando acerca de que si estuviera en mis manos el hacerlo, no le confiaría a esta corte electoral ni la elección de Miss “Hawaiian Tropic”.

4 comentarios:

Ego Ipse dijo...

¿El exabrupto del mirista narcovinculado Vacaflor camino a un clásico? Nááááááá... No sólo razona mal, sino que ni bien escrito está.

Me quedo con las dos respuestas hechas públicas hasta ahora. Ninguna de calidad literaria, pero ambas de una calidad ética y humana que al mirista narconvinculado le faltó...

Anónimo dijo...

Antología, que palabra hermosa! ¿Acaso difícil de entrar en ese parnaso de la “antología poética” aunque sea la nacional ya que la universal está mas lejos de casa que Neptuno?. Como dices tu entre asombrado y encandilado: “...una zamba canuta de antología (“Nosotros, los sucios” Humberto Vacaflor, La Razón). Va en camino a convertirse en un clásico del género columna.” Yo pensaba si no sería mas apropiado decir: “...un clásico del género calumnia.” Suena mas cercano a la intención, aunque la semántica perversa de pronto cambie el término gracias a unos cuantos ajustes de “ingenieria lingüística” o de “ingenio alto – peruano”, da igual... A nosotros nos parece que en esta época cualquiera puede parecer “limpio” y al mismo tiempo parecer “sucio”, o como dice el lema banal con el que finalizan todos los “oficios” y escritos militares en nuestra tierra: “ser antes que parecer”. Otro desliz del idealismo semántico que infecta a tantos compatriotas intelectuales, todo esto va creando una paranoia – esquizofrénica desmesurada y que a momentos se intensifica al vaivén de las sinuosidades que producen los interminables referendums. Somos un país de fantasmas y aparecidos; un conglomerado humano de apariencias y metamorfosis... Un día somos, al otro ya aparentamos y al tercero éramos, luego nos transmutamos y recreamos nuestro ser en otro avatar... algo que algunos también llaman “mutabilidad continua” otros lo llaman “marasmos”, en fin de todo un poco se puede especular... Lo inexplicable de todo el asunto es tu empecinado golpetear sobre los hechos e intentar a plan de combazos deformar el panorama de los resultados del último “reverendum”, si fuéramos puristas éticos al estilo del viejo Kant, empezaríamos por desmenuzar la sedición de los ricos en el Oriente del país y quizás con la misma cirugía forense que aplicamos a Evo&Co. descubrir la abundante metástasis fascista que han generado...

Un saludo telúrico!
Bradpit Huanca

Napoleon Quispe dijo...

Ego ipse es de los que cree que un exceso se salva con otro, que, como quien dice, un clavo saca a otro clavo. Pues resulta que no.

Ego Ipse dijo...

Vaya... ¿Puedo, mi estimado Napoleón, nombrarte mi primer fan oficial? Jamás nadie me había perseguido post tras post, blog tras blog para comentar lo que comento de forma tan maleducada, a saber: sin siquiera dedicarle una palabra, ignorando por completo lo que hubiera dicho el/la anfitrion/a. En fin, por supuesto que un clavo no saca a otro clavo. Y eso es todo lo que mi comentario quería hacer ver: el clavo de S. E. no se saca con el clavo de la bazofia homofóbica y contraria a todo periodismo profesional de cow-flower...

En fin... Lo único que triste de todo esto es que alguien medianamente serio considere que una catarsis homofóbica, que falta intencionalmente a la verdad y que usa al periodismo no para informar sino para hacer un acto político, como la bazofia de vache-fluer, esté camino a convertirse en un clásico del género columna... Si ése es el caso, ya se entiende porqué el boliviano es un de los peores y menos profesionales periodismos del mundo....

Zamba canuta al propio gremio le dio cow-flower... Por favor llámenlo a jubilación para que no los siga avergonzando de semejante forma...